El Departamento de Acción Climática, Alimentación y Agenda Rural publica una nueva guía sectorial para ayudar a los comedores escolares a prevenir el desperdicio alimentario. La Guía para la prevención del derroche alimentario en los comedores escolaresque se ha realizado en colaboración con el Departamento de Educación y de diversas entidades y empresas del sector, se ha presentado oficialmente en el Instituto Escuela Mossèn Cinto (Folgueroles), donde ha tenido lugar la Jornada “Prevención del derroche alimentario en los comedores escolares”.
El acto ha reunido a casi un centenar de personas y ha contado con la bienvenida del secretario de Alimentación del Departamento, Carmel Mòdol y Bresolí, y la secretaria de Transformación Educativa del Departamento de Educación, Núria Mora y la directora del centro, Sílvia Rodríguez.
Mòdol ha destacado que este documento “sienta las bases para diseñar e implantar un plan de prevención del derroche alimentario en los comedores escolares”. La guía ofrece al sector una herramienta de referencia para dar cumplimiento a una de las obligaciones recogidas en la Ley 3/2020, de 11 de marzo, para la prevención de las pérdidas y el desperdicio alimentario, para los agentes de la cadena alimentaria, a excepción de las microempresas que es disponer de un plan de prevención del desperdicio alimentario.
“Los centros educativos también tienen la responsabilidad de diseñar programas de educación para la reducción del desperdicio alimentario, y que esta guía también les ayudará a impulsar acciones de sensibilización dirigidas a toda la comunidad educativa que permitan abordar este reto global desde la acción cotidiana y local”, ha añadido Mòdol.
El secretario de Alimentación también ha agradecido la intensa colaboración del Departamento de Educación, de empresas y entidades del sector en la elaboración de la guía y ha destacado la voluntad del Departamento de Acción Climática de que sea un “documento de referencia” para todos los centros educativos del país y para las empresas que ofrecen servicios de comidas a los comedores escolares, para ayudarlas a ser más eficientes ya reducir el desperdicio alimentario, desde la gestión de las compras hasta la gestión de los excedentes.
Por su parte, Mora ha hecho constar la importancia que el Departamento de Educación otorga a la Guía que se presenta “como un elemento que debe facilitar el trabajo de concienciación, información y educación sobre las pérdidas y el derroche alimentarios, más allá de las medidas que deben tomarse en el propio comedor escolar”.
“La Guía debe convertirse en una herramienta más para los centros educativos y para las empresas gestoras, para el trabajo en torno a la promoción de los buenos hábitos alimenticios a través de la educación en el consumo de productos alimenticios saludables, de producción local, de temporada y de calidad, así como en la importancia de la prevención y reducción de las pérdidas y el desperdicio alimentarios. Y desde la escuela, poder compartir con toda la comunidad educativa la práctica de la reducción del desperdicio alimentario, como objetivo de sostenibilidad y de solidaridad con toda la sociedad”, ha expuesto la secretaria.
Mora también ha añadido que, por este motivo, el Departamento de Educación ha colaborado en la redacción de la Guía desde los diversos puntos de vista: las propuestas educativas (en tanto la lucha contra el derroche debe integrarse como un elemento más del curricular transversal), la gestión del comedor escolar propiamente dicha (que tiene gran impacto en la organización del servicio por parte de las empresas y entidades que lo gestionan) y, a todos los efectos, de toda la gestión del centro educativo.
Asimismo, se espera seguir colaborando con la difusión del documento a todos los organismos implicados en la gestión de los comedores escolares (consejos comarcales, ayuntamientos, empresas y entidades prestamistas del servicio, patronales del sector de centros privados, centros educativos etc.). ), así como en el sector de las familias.
La guía se estructura en 10 pasos, entre los que cabe destacar la necesidad de cuantificar el desperdicio que se produce en cada uno de los procesos, para detectar puntos críticos e implementar mejoras; tener un personal bien formado en la temática; una correcta planificación y una buena comunicación de los resultados; un programa educativo para diseñar acciones de sensibilización con los niños y jóvenes.
Mòdol ha subrayado que la prevención del derroche alimentario es una «emergenciay que desde el DACC se realizan diversas acciones, que se enmarcan en la Estrategia “Aprovechamos los Alimentos” y en la Estrategia Alimentaria de Cataluña, para avanzar en la prevención de las pérdidas y el desperdicio alimentarios a lo largo de toda la cadena alimenticia, desde el sector primario hasta el consumidor final.
Posteriormente a la bienvenida, Isabel Coderch y Diana Reinoso, autoras de la guía, han presentado los principales contenidos del documento y han puesto de manifiesto que, aunque queda trabajo por hacer, los centros educativos y las empresas y entidades gestoras de comidas en los comedores escolares ya están realizando pasos firmes para prevenir y minimizar el desperdicio alimentario que se produce. Una buena prueba de ello, han sido los casos de éxito que han sido presentados en la jornada por Tatiana Pérez, de Serunion; Marí Garcia, de Campos Estela; Jordi Vila, de la AGA del Instituto Escuela Mossèn Cinto; Oriol Carbonell, de Fundesplai y 7 y Tria; y Magda Gómez, de Caballo de Cartón.
A continuación, ha tenido lugar la mesa redonda “Hacia comedores escolares más sostenibles”, con la participación de Gemma Salvador, de la Agencia de Salud Pública de Cataluña; Raquel Garcia directora general de Atención a la Familia y Comunidad Educativa del Departamento de Educación; Albert Roger, del proyecto Escuelas + Sostenibles del Ayuntamiento de Barcelona; y Cristina Marqués, del Consejo Comarcal del Vallès Occidental. La jornada fue conducida y moderada por el director de la Fundación Alicia, Toni Massanés.
La guía, que ya está disponible en la web del DACC, ha contado con el apoyo y colaboración de un Consejo Asesor formado por entidades públicas como el Departamento de Educación, la Agencia de Salud Pública de Cataluña, la Agencia de Residuos de Cataluña, la Agencia Catalana de Seguridad Alimentaria, el Ayuntamiento de Barcelona, el Consejo Comarcal del Vallès Occidental; entidades y empresas del sector como Asociación Catalana de Empresas del Ocio, la Educación y la Cultura (Acellec), Ecomenja, Asociaciones Federadas de Familias de Alumnos de Cataluña (AFFAC), Aramark, Arcasa, La Confederación, Pere Tarrés, Fundación Banco de Recursos, Campos Estela, Caballo de Cartón, Clece, Compass-Eurest, Fundación Espigoladors, F. Roca, Mediterránea Catering, Plataforma Aprovechamos los Alimentos, Rezero, Serunion, Sodexo y Saint Paul’s School.
Fuente de la información: El Departamento de Acción Climática publica una nueva guía sectorial para ayudar a los comedores escolares a prevenir el desperdicio alimentario